De vuelta y con "El secreto de la pirámide"

¡Por fin ! Como dije en la entrada anterior, me estaba mudando e iban a tardar unas semanillas en volver a instalar Internet en mi nueva casa, y, durante mi ausencia, parece que han ocurrido algunas novedades; han sacado el dvd y blu-ray de Sherlock Holmes de Ritchie, ha reeditado carátulas de clásicos, como "El secreto de la pirámide" , y, por cierto, con intenciones muy comerciales, y se ha rescatado del baúl de los recuerdos una canción infantil con Basil y la cantante francesa Douchka (en el que se aprecia que evidentemente, Basil no ha nacido para bailar) y algunas cosillas más.

Puesto que han reeditado su carátula y todo, pues ¿por qué no vamos a hablar del "Secreto de la pirámide"? Es una de la pelis de Holmes más relevantes, o por lo menos, he oído bastante sobre ella, además me gusta bastante. Y la receta para este largometraje es (redoble de tambores)....un Londres victoriano, una serie de horribles asesinatos, una secta egipcia y a Holmes y a Watson...como un par de niños.

Viene de la mano de Paramount Pictures, con Spilberg como productor, con Barry Levinson como director, y a Nicholas Rowe, como Holmes, Alan Cox, como Watson y a Sophie Ward como la enamorada de Sherlock. Es del año 1985, y es de esas películas que por más que las ves no te cansas nunca de ellas. Tiene gran cantidad de efectos especiales, pero no son nada comparado con los que hay hoy en día, pese a ello, para su época no están nada y mal y por ello estuvo nominada al oscar de mejores efectos visuales.

Todo empieza cuando el futuro doctor Watson es internado en un colegio de Londres, y por casualidad, conoce a otro muchacho, que es célebre por allí por su capacidad deductiva y sus dotes de observación.Los chicos se hacen amigos, y comienzan las aventuras. Se acontecen en Londres unos asesinatos, que al ser tan extraños y singulares quedan en suicidios. En el largometraje, las víctimas ven unas alucinaciones tan espantosas y terribles que de una manera u otra producen la muerte, ya sea opinando que tu perchero es un víbora que te quiere como almuerzo y creyendo que tu casa arde en llamas, lo que conlleva a que te tires por la ventana suponiendo que es tu única salvación...esa escena de la película me deja con mal sabor de boca, demasiada psicosis para mi gusto.

Y Holmes, que desde joven ya le gustaba este tipo de cosas, se prepara para su mayor oportunidad para iniciarse como detective y la primera andanza junto con Watson y se pone manos a la obra a investigar, y hasta ahí puedo contar...

La película también tiene sus novedades y posibles explicaciones a, por ejemplo, por qué Holmes usa esa gorra de cazador (que en realidad NUNCA, repito, NUNCA menciona el canon) y que en la peli es bastante cutre, por qué fuma en pipa, o por qué nunca se ha casado, ahí sí que os pica la curiosidad, bueno es que en el cole tenía una novia y por circunstancias de la vida...

Pero he de decir, que hay DOS cosas de esta peli que no me gustan nada:

• La aburrida y hartiza frase del "Elemental..." que como todos los queridos lectores saben nunca la escribió Doyle.
  

• Nos ponen a Watson como un chaval goloso y glotón que en lo único que piensa es en comer y en los dulces. Esto ya era habitual en las pelis de Holmes, pero el colmo es cuando a Watson también le disparan unos de esos dardos alucinógenos y delira con dulces y pastelitos que le quieren atacar. En cambio la actitud de Watson es lo que más me satisface de la peli de Ritchie, Watson no es como siempre lo pintan, es joven, aventurero, desde luego no es tonto y sabe poner a Sherlock en su lugar cuando debe(aunque a veces no lo consiga, pero la intención es lo que cuenta) .

Pero al fin y al cabo merece la pena echarle un vistazo, y es una película perfecta para iniciarse en el mundillo (o para iniciar a alguien), da igual la edad y no importa lo que sepas de Holmes, le suele gustar a todos y sales con un buen sabor de boca después de verla, sobretodo, si te quedas a esperar después de los créditos, y ves la sorpresa final, de alguien que acecha entre las sombras...